PROTOCOLO DEL TRATAMIENTO DE LA DEGENERACIÓN

MACULAR SENIL HUMEDA CON VERTEPORFINO.

Dr J.L. Olea, Dr J.M. Mateos , Dra P. Mulet

Servicio de Oftalmología.Hospital Son Dureta.

Palma de Mallorca 25 de Julio de 2000.

INTRODUCCIÓN.

La Degeneración Macular Senil (DMS) es la causa más frecuente de ceguera legal (inferior a 0.1) en los paises civilizados, en las personas mayores de 55 años.

Existen dos formas clínicas:

· La DMS seca, es la más frecuente y se caracteriza por una perdida progresiva, lenta de visión central, debido a una atrofia progresiva de los fotoreceptores, epitelio pigmentario y coriocapilar en el area macular.

· La DMS húmeda, aproximadamente el 10-15 % de todas las DMS, se caracteriza por la aparición, de forma brusca, de unos neovasos provenientes de la coriocapilar que producen un deterioro rápido de la agudeza visual, tanto mayor cuanto más cerca están de la región foveal, aumenta rápidamente de tamaño hasta que engloba todo el área macular en pocas semanas.

No existe ningún tratamiento para la DMS, sin embargo, recientemente ha probado su utilidad, en algunas DMS húmedas subfoveales la denominada terapia fotodinámica (TPD), que básicamente consiste en la sensibilización selectiva de los neovasos por un colorante, el verteporfino, que permite la trombosis de los vasos neoformados al aplicar un láser de 690 nm (rojo).

El progresivo envejecimiento de la población hace que cada vez sean más frecuentes la patología involutiva entre la que se encuentra la DMS, el tratamiento paliativo de la misma, permite mejorar la calidad de vida de estos pacientes.

PROTOCOLO.

  1. Criterios de inclusión y exclusión.

Criterios de inclusión.

Se indicará la técnica a aquellos pacientes diagnosticados de DMS húmeda subfoveal, con una agudeza visual igual o superior a 0.1 y que en la AFG presentan una membrana neovascular con un componente clásico superior al 50 %. Es el subgrupo de pacientes que en el TAP más se benefician de esta terapia.

Criterios de exclusión.

- DMS húmeda subfoveal que no cumplen todos y cada uno de los criterios de inclusión.

- Membranas subfoveales idiopáticas,

- Membranas subfoveales secundaris a inflamación, trauma o enfermedad degenerativa (miopía, estrias angioides, ...).

2. Exploración.

Nuestro hospital es el de referencia de todas las islas Baleares, por tanto nuestros pacientes son remitidos a nuestro servicio procedentes de los hospitales de Ibiza, Menorca, Manacor y Hospital General que acudirán con el preceptivo informe y diagnóstico.

También acudirán procedentes del área que cubre el propio servicio de Oftalmología, es decir zona del Ambulatorio del Carmen, Inca y Cruz Roja. A todos los pacientes se les abrirá una historia clínica en la que figure, imprescindiblemente:

· Agudeza visual lejos y cerca corregida de ambos ojos.

· Biomicroscopia del Segmento Anterior.

· Presión ocular.

· Biomicroscopia del Segmento posterior con cristal de Goldmann.

· Angiofluoresceingrafía.

3. Tratamiento.

Si el paciente cumple todos los requisitos expuestos en los criterios de inclusión, se remitirá a la semana siguiente al Gabinete de Oftalmología, donde se efectuará el tratamiento de forma ambulatoria, una vez haya firmado el consentimiento informado de la técnica. Se efectuará en dos fases:

Primera fase. Se prepara una dosis de verteporfino de 6 mglm2, que se inyectará por vía endovenosa con una bomba de infusión a una velocidad calculada para que la administración total dure 10 minutos.

Segunda fase. Transcurridos 15 minutos después del inicio de la infusión, el fármaco es activado con un haz de láser no térmico, (Visulas Zeiss) que se aplica durante 83 segundos.

El paciente es remitido a su domicilio especificandole, nuevamente, los cuidados que debe tener, especialmente, de no exposición solar, en las 48 horas siguientes.

4. Seguimiento.

Las siguientes revisiones se efectuarán a la semana, el mes, segundo mes, tercer mes, y luego cada 3 meses durante 2 años, salvo que antes note una disminución de agudeza visual subjetiva.

La AFG se incluirá obligatoriamente en la exploración de los 3 y 6 meses, o antes si se produce un descenso de agudeza visual y se objetiva o sospecha, oftalmoscopicamente, una recidiva de la membrana.

Si se produce una recidiva o reactivación de la membrana tratada (reapertura de los vasos neoformados trombosados) se procederá a un nuevo tratamiento, se estima que cada paciente recibirá por termino medio tres tratamientos al año. En cada nuevo tratamiento se aplicará el protocolo desde el punto 3.

EPILOGO.

La TPD es un nuevo modelo de tratamiento basado en la sensibilización del endotelio vascular por un colorante vital que luego es selectivamente lesionado por un láser de uña determinada longitud de onda.

Desde la aparición en Octubre 99 (Arch. Ophthalmol. 1999; 117:1329-1345) de los resultados del estudio multicéntrico, protocolizado, randomizado, donde pone de manifiesto su utilidad, se ha comenzado a utilizar, extendiendose por toda la geografía Europea y Americana, aprobado en Diciembre, por la FDA, para su indicación en DMS, se ha comenzado a aplicar en España, ha comienzos de 2.000, en principio como "tratamiento compasivo" de la DMS.

Se ha montado dicha técnica en múltiples centros privados nacionales y algunos centros públicos.

En la actualidad, y aunque aún no existen estudios que lo avalen, se esta utilizando en D~M.S. subfoveales con membranas clásicas y con agudezas inferiores a 0.1, también se esta estudiando su uso en las membranas subfoveales de la miopía magna o en tumores, como el angioma coroideo.

Aunque sólo disponemos de las publicaciones, en la DM5, con su uso durante un año, parece que en el estudio del segundo año, ya finalizado, pero no publicado, sigue demostrando su utilidad. Probablemente, ha medida que se efectúan más tratamientos el número de recidivas o reactivaciones disminuyan, y estos pacientes no tengan que verse sometidos a repetidos tratamientos, que por otra parte son muy costosos y no exentos de efectos secundarios.

Tambien se estan ensayando otros colorantes, que permitan una mayor efectividad con menor costo, menores efectos secundarios, pero todos ellos basados en el mismo principio. Probablemente, tanto el colorante utilizado, vehiculizado en liposomas, como el láser empleado, específico para este fármaco, se irán sustituyendo por otros más efectivos.